Aunque son muchos los momentos con carácter festivo o cultural que vivimos en Ariño a lo largo del año, no son comparables con lo que significa para nosotros la llegada de las Fiestas de Agosto, donde la tradición nos emplaza a vivir y disfrutar de unas intensas jornadas, llenas de convivencia, alegría y diversión. Unos días tan esperados por los propios vecinos de Ariño como por los numerosos visitantes, que año tras año reservan sus vacaciones para hacerlas coincidir con nuestras fiestas, ya que estos días son días de encuentro, donde todos se sienten como en casa. Una ocasión única para compartir momentos de conversación y baile con familiares y amigos, de conocer gente, de reencuentros, de recuerdos, etc.
Siempre he dado a estas fechas un valor especial, pues ya desde mi niñez las fiestas patronales han significado para mí un punto de inflexión en el calendario. Ha sido siempre un buen momento para hacer un alto en el camino, para reflexionar sobre lo logrado a lo largo del año y de retomar fuerzas para emprender nuevos retos.
Un año en el que el 5 de marzo nos estremecía a todos una terrible noticia. El desgraciado fallecimiento en su puesto de trabajo de un minero de Ariño. Algo que no ocurría en nuestro pueblo desde hacía 36 años. Ariño entero se volcó para acompañar en su dolor a la familia. Esta tragedia nos hizo recordar la dureza y el riesgo que tiene el oficio de minero. Porque todos en este pueblo tenemos algo que ver con la minería. Un gran número de ariñeros siguen trabajando en la mina hoy día y muchos otros lo han hecho a lo largo de la dilatada historia minera de nuestro pueblo.
El haber vivido durante tantos años en este ambiente minero es algo que imprime carácter a los ariñeros y ariñeras, somos gente luchadora, solidaria, amiga, valiente, optimista ,... todos esos valores que nos han transmitido los mineros, esos hombres y mujeres que han desarrollado un trabajo duro y muchas veces poco reconocido a lo largo de los años. De ese sentimiento minero emanan las señas de identidad de este pueblo, de todos los que somos de aquí. Somos gente especial, que defendemos con entusiasmo nuestro pueblo, nuestras identidades, nuestras tradiciones y que por encima de todo, nos sentimos muy orgullosos de ser como somos y de por qué somos.
Somos también un pueblo de acogida, un pueblo que lleva casi 100 años recibiendo con los brazos abiertos a hombres y mujeres que han llegado a nuestro pueblo buscando un futuro mejor y que finalmente se han quedado a vivir con nosotros. Este carácter hospitalario y acogedor hizo que en febrero se nos otorgara el "Premio Aragón Intercultural 2.008", por nuestro "I Encuentro entre Culturas Polaca y Española", convocado por primera vez por la Consejería de Educación y Cultura del Gobierno de Aragón para reconocer la labor social de las diversas administraciones públicas para fomentar el diálogo entre culturas. Mi agradecimiento a toda la comunidad polaca de Ariño y alrededores por su trabajo y por compartir con nosotros sus tradiciones.
La convivencia y tolerancia son dos valores fundamentales para conseguir el progreso de los pueblos, y ese es el objetivo que se ha marcado el Gobierno municipal que tengo el honor de presidir, que Ariño sea un pueblo cada vez mejor, que los ariñeros y ariñeras tengamos más oportunidades y que nuestros hijos tengan futuro, pero también un presente esperanzados Siempre he pensado que en cualquier aspecto de la vida lo importante es sumar esfuerzos, y mucho más cuando el objetivo es intentar mejorar nuestro pueblo y con ello, la calidad de vida de los ariñeros y ariñeras.
Pero ahora es tiempo, si es posible, de olvidar los sinsabores pasados, al menos durante estos días, y disfrutar de la Fiesta y del programa festivo que con tanto cariño e ilusión ha preparado para todos la Comisión de Fiestas.
Una Comisión de Fiestas que de forma voluntaria y callada, y con muchas ganas y esfuerzo personal, llevan trabajando durante todo el año por conseguir las mejores fiestas. Llenando un programa de actividades lúdico festivas, el cual se adapte a los gustos y requerimientos de cuantas personas viven y nos visitan en estos días tan especiales. Felicitar de todo corazón a los chicos y chicas de la comisión que han trabajado y van a seguir trabajando durante todas las fiestas para conseguir que todos las podamos disfrutar de la mejor forma posible.
Ellos ya han hecho su trabajo, ahora nos corresponde a nosotros llenarlo de sentido, es el momento de salir a la calle, de llenar plazas y peñas, y de compartir momentos de alegría y diversión con familiares y amigos. Tiempo y lugar vamos a tener para ello y estoy seguro que no vamos a dejar pasar la ocasión.
Me gustaría agradecer también su trabajo a todas las peñas, asociaciones, entidades públicas y privadas, a todos los colaboradores, así como al personal del Ayuntamiento; para lograr entre todos que estas Fiestas 2.009 sean inolvidables, y que perduren en nuestra memoria junto a los mejores de nuestros recuerdos.
También deseo solicitar comprensión y paciencia a todos los vecinos que por motivo de las fiestas ven alterada su vida diaria, no pudiendo dormir y descansar lo necesario durante estos días. Junto a esa solicitud apelo especialmente a la juventud de Ariño, confío plenamente en ellos y les pido que disfruten y vivan con pasión las fiestas, con el único límite del respeto a los derechos y la libertad de los demás.
Para terminar quiero enviar un emocionado y cariñoso recuerdo para todos los que ya no están entre nosotros. Sus recuerdos siempre estarán en nuestros corazones.
Deseándoos mucha felicidad, un abrazo para todos.
Vuestro amigo y Alcalde,
Joaquín Noé Serrano